Tarta 1906 Black Coupage con crema de queso al café y salsa de caramelo salado.

Esta semana ha sido el cumpleaños de Iván, y en un día tan especial no puede faltar su tarta favorita: la tarta de chocolate y cerveza negra. Habitualmente se prepara con la cerveza Guinness, y así lo hacía también yo, pero desde el momento que probé la 1906 Black Coupage de Estrella Galicia sabía que tenía que preparar una tarta con ella. Ya en el primer trago se advierten notas a café, chocolate y caramelo, que combinados con el amargor propio de la cerveza da como resultado una mezcla de sabores perfecta para plasmarlos en un dulce.

Conste que Estrella Galicia no nos patrocina, los lectores habituales del blog sabéis que, simplemente somos devotos, y es que en para los gallegos la cerveza Estrella Galicia, es algo de lo que sentirnos orgullosos, un símbolo más de nuestra gastronomía, como el pulpo á feira o el licor café.

Y aunque con estos calores no apetece preparar un bizcocho, os aseguro que es una tarta por la que merece la pena encender el horno.

tarta-cerveza-negra



Ingredientes.

Para el bizcocho.

250 ml de cerveza negra 1906 Black Coupage de Estrella Galicia.
250 g de mantequilla.
75 g de cacao puro Valor.
250 g de azúcar blanco.
150 g de azúcar moreno.
140 ml de nata.
2 huevos M
1 cucharadita de licor café.
250 g de harina.
2.5 cucharaditas de bicarbonato.

 Para el relleno y la cobertura.

500 g de queso crema.
1 cucharada sopera de café soluble.
1 cucharadita de licor café.
Azúcar glas al gusto (unos 60g).

Para la salsa de caramelo salada.

160 g de azúcar.
60 g de mantequilla salada.
115 g de nata.

Elaboración.

Comenzamos preparando el bizcocho. Como ya he comentado en otras ocasiones, a mi me gusta preparar tanto los bizcochos como la crema el día anterior al montaje de la tarta para que estén reposados y sean más fáciles de trabajar.

Precalentamos el horno a 180ºC y preparamos dos moldes de 22cm.

Calentamos la cerveza a fuego suave sin que llegue a hervir, añadimos la mantequilla cortada en trozos y removemos hasta que se funda. Retiramos del fuego y dejamos que enfríe un poco.

Tamizamos la harina con el cacao y el bicarbonato y mezclamos con los dos tipos de azúcar. He incluido azúcar moreno para destacar los aromas a toffe ya presentes en la cerveza.

Batimos la nata con los huevos y el licor café, con ayuda de unas varillas, añadimos la cerveza y batimos de nuevo hasta que se integre en la mezcla.

Incorporamos los ingredientes sólidos y batimos hasta obtener una masa sin grumos.

Repartimos la masa entre los dos moldes y horneamos 25 minutos aproximadamente. Yo los he retirado cuando el centro todavía estaba húmedo (se nota por el color de la masa) pero cocido, al pinchar con una brocheta sale prácticamente limpio.


La cobertura es clásica crema de queso, a la que en este caso le hemos añadido una cucharada de café soluble y una cucharadita de licor café. Batimos todo junto con unas varillas hasta obtener una crema homogénea y sin grumos. La cantidad de azúcar es aproximada, no suelo pesarlo cuando preparo esta crema, simplemente voy añadiendo y probando hasta que la encuentro a mi gusto.

Al preparar la crema el día anterior al montaje y dejarla reposar en la nevera no es necesario añadirle grandes cantidades de azúcar  y mantequilla, el frío hará que endurezca y adquiera la consistencia necesaria para rellenar y decorar la tarta.

Cuando desmoldéis los bizcochos veréis que son extraordinariamente tiernos y jugosos, por eso hay que manipularlos con cuidado para que no se rompan. En mi caso no ha sido necesario recortarlos, al estar el bizcocho tan húmedo el centro  se hunde ligeramente y eso lo corregimos al extender la crema.

La salsa de caramelo la preparamos el mismo día del montaje de la tarta.

Calentamos la nata, no es necesario que hierva, pero si que esté caliente cuando la añadamos al azúcar.
Ponemos el azúcar en un cazo y lo llevamos a fuego suave, removiendo constantemente para que no se queme. Cuando todo el azúcar haya adquirido un color dorado lo retiramos del fuego y vertemos sobre él la nata caliente. Lo hacemos suavemente y con cuidado de no quemarnos ya que comenzará a chisporrotear y subir . Removemos la mezcla y añadimos la mantequilla cortada en cubitos. Volvemos a poner la salsa al fuego y seguimos removiendo hasta que esté todo integrado, con cuidado de que la mezcla no hierva.  Retiramos del fuego y esperamos a que enfríe y coja consistencia para poder usarla.

Colocamos el primer bizcocho y extendemos sobre él la mitad de la crema de queso al café, a continuación, con la ayuda de una jarrita vamos regando de salsa de caramelo . Colocamos el segundo bizcocho y extendemos el resto de la crema por toda la superficie de la tarta.

En este caso no buscaba un acabado perfecto, sino un cierto toque rústico que no esconda el bizcocho. Finalizamos regando con abundancia con la salsa de caramelo salado y dejando que gotee por los laterales.

El resto de la salsa lo servimos con la tarta por si algún goloso/a  quiere un extra de caramelo.



Es una tarta que os va a sorprender, un bizcocho muy húmedo, con un sabor muy intenso a chocolate y un toque ligeramente amargo, la crema y salsa de caramelo salado le aportan el toque dulce que en ningún caso llega a ser empalagoso.







Comentarios

  1. La pinta es absolutamente irresisitible. La próxima vez que la prepares guárdame un trozo por favor

    ¡Besos mil1

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  2. En primer lugar y aunque sea con retraso muchaaaaaaaaaaas felicidades al cumpleañero , la tarta es divinisimaaaaaaaa para no variar como todo lo que sale de tu cocina.
    Con lo chocolatera que soy no dudo ni un segundo que ademas de sorprenderme me va a encantar con tu permiso me guardo la receta en pendientes.
    Bicos mil y feliz semana wapisima.

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