Té americano

La primavera empieza a asomar y se acerca el tiempo de quitarnos los abrigos así que al llegar esta época somos muchos los que nos proponemos perder un poco de peso. Pero las dietas tienden a ser muy monótonas y aburridas y por lo general acabamos cansados de la lechuga y el pollo a la plancha. Si siempre es recomendable realizar cinco comidas al día en el momento que seguimos una dieta de adelgazamiento lo es todavía más, el picoteo de media mañana y la merienda nos quitan la ansiedad y evitan que lleguemos muertos de hambre a la comida o la cena.

Hoy os traigo una alternativa para ese picoteo mañanero o la merienda: el té americano.

Evidentemente no tiene ninguna complicación, es rápido y sencillo de preparar, es ligero y lo mejor: es un magnífico reconstituyente que nos llena de energía. Yo lo descubrí en mi época de universidad, en esas largas jornadas de estudio, cuando me encontraba saturada que no podía más, hacía un descanso para tomar este té y volvía a la carga con las pilas puestas.

Ingredientes:
2 bolsitas de té
una ramita de canela
1 vaso de leche
2 tiras de corteza de limón

Elaboración.
Podemos utilizar nuestro té favorito pero hay que tener en cuenta que no todos los tés son recomendables para infusionar en leche, los tés muy intensos como los verdes y los pu erh (té rojo) no son los ideales para esta preparación y es mejor tomarlos con agua. Una variedad que va perfecta es el earl grey, un té negro aromatizado con bergamota que resulta delicioso con leche o sin ella (personalmente lo prefiero con leche), en esta ocasión he utilizado dos bolsita de Tettley una de las más conocidas marcas británicas y que es una mezcla de tres variedades: assam, africano y ceylan.

Calentamos la leche hasta llevarla a ebullición, cuando rompa a hervir la vertemos en la tetera en la que habremos colocado dos bolsitas de té, un palito de canela y la corteza de limón, tapamos y dejamos reposar 4 minutos.

Yo las infusiones las tomo siempre sin azúcar para apreciar mejor los aromas, pero eso ya sabeis que va en gustos.

Si como yo sois adictos a la canela le podeis espolvorear una poca ya con el té en la taza, es buenísima para la salud ( antibacteriana, antiinflamatoria, antioxidante, facilita la digestión...) y además dicen que es afrodisíaca, jeje.






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