Galletas de mantequilla y frutos secos

Pues sí, otra ausencia prologada, no tengo excusa, lo sé, pero hace ya tiempo que decidí que el blog es simplemente una afición, no es una obligación y si hay momentos en los que no encuentro tiempo de calidad para dedicarle prefiero no hacerlo.

Ahora me encuentro con ganas renovadas, de cocinar, de publicar, de contar cosas y por eso estoy nuevamente por aquí.

Es raro que hasta ahora no hubiese publicado estas galletas porque las preparo con mucha frecuencia y siempre son un éxito. Son unas galletas ideales para acompañar el té o el café de la merienda, tienen una textura suave y tierna pero con el toque crujiente de los frutos secos.

Se trata de una receta muy versátil en la que se puede usar cualquier tipo de fruto seco, cambiando las avellanas por nueces, las pasas por arándanos secos y el licor de avellanas por extracto de vainilla tendrás unas galletas con un sabor talmente diferente pero igual de deliciosas.

Ingredientes.

125 g de mantequilla a temperatura ambiente

320 g de harina

1 huevo L

125 g de azúcar

15 g de avellanas troceadas

25 g de orejones de albaricoque

25 g de uvas pasas

1 cucharadita de licor de avellana

Elaboración.

Precalentamos el horno a 160ºC.

Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que blanquee, añadimos el huevo y el licor de avellanas y volvemos a batir hasta que esté totalmente integrado. Agregamos los frutos secos cortados en trocitos y batimos un poco más para que se repartan de manera uniforme por la masa.

Añadimos la harina con la sal poco a poco sin parar de amasar hasta conseguir una masa suave pero que se despegue de los dedos. Formamos una bola con la masa y la dividimos en 4 trozos. Estiramos cada porción entre dos papeles de horno intentando que quede del mismo grosor.

Cuando tengamos la masa lista la guardamos en el frigorífico envuelta en papel de horno y repetimos la operación con las demás porciones.

Enfriamos la masa durante al menos 1 hora y la cortamos.

Horneamos las galletas unos 20 minutos a 160ºC.

Dejamos enfriar las galletas en las bandejas durante 5 minutos y después las cambiamos a una rejilla para que enfríen por completo.

*Hemos de tener en cuenta que al llevar tropezones las galletas no quedan con un corte perfecto. Además la fruta se va a hinchar durante el horneado, sobresaliendo un poco, esto le va a dar un aspecto rústico, muy auténtico, de un dulce totalmente hecho en casa.