Lemonade cupcakes

O lo que es lo mismo unos cupcakes con mucho sabor a limón.

El blog de Tito: la cocina sin complicaciones cumple un año, y nos pide que preparemos nuestro mejor postre para celebrarlo. Con esta receta quiero participar en su concurso y, desde luego, han sido los mejores cupcakes que he preparado hasta ahora, han desbancado de sus puestos a mis favoritos: los red velvet cupcakes y los muffins de manzana y canela.

Seguro que muchos conoceis ya a Tito, y a los que no, os recomiendo que os paseis a visitarlo porque además de encontrar estupendas recetas os vais a reir un montón con sus anécdotas y las historias que nos cuenta.

Ingredientes.

Para los cupcakes:

200 g de harina

1 cucharadita de levadura

1/2 cucharadita de bicarbonato sódico

2 huevos

200 g de azúcar moreno

90 g de mantequilla derretida

2 yogures de limón.

Para la crema de limón.

3 cucharadas de maicena

300 ml de agua

el zumo y la ralladura de 2 limones

2 yemas

5 cucharadas de azúcar

Para el frosting.

200 g de queso crema

azúcar glass

crema de limón

Elaboración.

Precalentamos el horno a 180ºC.

Mezclamos la harina con la levadura y el bicarbonato y tamizamos.

En otro bol batimos los huevos con el azúcar, cuando doblen su tamaño añadimos la mantequilla y los yogures y volvemos batir. Añadimos los ingredientes sólidos y mezclamos con movimientos suaves hasta integrar la harina.

Con una cuchara vamos llenando los moldes hasta sus 3/4 partes y horneamos unos 15-20 minutos, o hasta que al meter un palillo este salga limpio.

Dejamos reposar 5 minutos en el molde y después enfriamos completamente sobre una rejilla.

Para preparar la crema de limón he usado una receta del libro "Panadería y repostería" de la editorial Parragon, un libro muy bueno y que os recomiendo.

Mezclamos la maicena con parte del agua para formar una pasta. En un cazo vertemos el resto del agua, el zumo y la ralladura de limón y la pasta de maicena, llevamos a ebullición y cocemos a fuego suave durante unos 2 minutos sin dejar de remover, hasta que tenga consistencia.

Retiramos del fuego, añadimos el azúcar y las yemas y cocemos 1 minuto más. Dejamos enfriar.

Para el frosting, batimos el queso y vamos añadiendo azúcar glass, agregamos la mitad de la crema de limón y volvemos a batir. Reservamos un par de horas en la nevera para que coja consistencia.

Retiramos el centro del cupcake con un descorazonador de manzanas o una cucharilla y rellenamos con el resto de la crema de limón.

Colocamos la cobertura de queso y limón en una manga pastelera y decoramos a nuestro gusto.

Para conseguir el efecto bicolor, con un palillo cojemos una pizca de colorante en gel y dibujamos líneas en el interior de la manga pastelera antes de introducir la crema, yo dibujé dos líneas en los extremos opuestos.

Los que no se consuman en el momento los guardamos en el frigorífico. Son deliciosos, refrescantes y con mucho sabor a limón. Un éxito asegurado para los días de calor.

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